Un grifo que gotea puede ser un problema frustrante, pero también uno que se puede arreglar fácilmente. En este artículo, exploraremos los diferentes tipos de grifos y los pasos que puede seguir para arreglar un grifo que gotea.
1. Identifique el tipo de grifo: Existen varios tipos de grifos, como los de compresión, los de cartucho y los de disco cerámico. Los grifos de compresión tienen dos mangos y utilizan arandelas de goma para controlar el flujo de agua. Los grifos de cartucho tienen un mando y utilizan un cartucho para controlar el caudal de agua. Las griferías de disco cerámico tienen un mando y utilizan un disco cerámico para controlar el caudal de agua. Identificar el tipo de grifo que tiene le ayudará a determinar el mejor curso de acción para reparar la fuga.
2. Reúna las herramientas necesarias: Antes de empezar, reúna las herramientas necesarias, incluyendo una llave inglesa, unos alicates, una llave ajustable o un destornillador, dependiendo del tipo de grifo. Además, es posible que necesite una pieza de repuesto, como una arandela, un cartucho o un disco cerámico nuevos.
3. Cierre el suministro de agua: Antes de comenzar cualquier reparación, asegúrese de cerrar el suministro de agua al grifo. Esto evitará que el agua fluya mientras usted trabaja en la llave.
4. Grifos de compresión: Si tiene un grifo de compresión, la causa más probable de la fuga es una arandela desgastada. Para solucionarlo, utilice una llave inglesa para retirar la maneta y, a continuación, unos alicates para retirar el vástago. Una vez retirado el vástago, podrá ver la arandela. Sustituye la arandela por una nueva y vuelve a montar el grifo.
5. Grifos de cartucho: Si tiene un grifo de cartucho, la causa más probable de la fuga es un cartucho desgastado. Para solucionarlo, utilice una llave ajustable para retirar la maneta y, a continuación, utilice unos alicates para retirar el cartucho. Sustituye el cartucho por uno nuevo y vuelve a montar el grifo.
6. Grifos de disco cerámico: Si tiene un grifo de disco cerámico, la causa más probable de la fuga es un disco cerámico desgastado. Para solucionarlo, utilice un destornillador para retirar la maneta y, a continuación, unos alicates para retirar el disco cerámico. Sustituya el disco cerámico por uno nuevo y vuelva a montar la grifería.
7. Prueba el grifo: Una vez que hayas terminado las reparaciones, vuelve a abrir el suministro de agua y prueba el grifo para asegurarte de que la fuga se ha solucionado. Si la fuga persiste, o si el grifo sigue goteando, es posible que deba consultar a un fontanero profesional.
En conclusión, reparar un grifo que gotea es una tarea relativamente sencilla que puede realizar la mayoría de los propietarios de viviendas. Identificando el tipo de grifo, reuniendo las herramientas necesarias, cerrando el suministro de agua y siguiendo los pasos adecuados para su tipo de grifo, puede arreglar un grifo que gotea y ahorrar dinero en la factura del agua. Es importante tener en cuenta que si el problema persiste después de intentar arreglarlo, lo mejor será buscar ayuda profesional.
